Buen día queridos lectores, hoy les explicaré qué es el sustantivo y cuáles son los tipos de sustantivos.El sustantivo es la palabra que se refiere a cosas, seres, personas, animales u objetos.
Desde el punto de vista semántico o del significado, los sustantivos se clasifican en comunes y propios, concretos y abstractos, e individuales y colectivos:
Los sustantivos comunes se refieren a cosas o personas de una misma especie: colina, encendedor, muchacha.
Los sustantivos propios se aplican a cosas o individuos que se distinguen de otros de la misma especie. De esta manera, Atlántico, París, Guillermo señalan a un océano, a una ciudad y a un ser humano en particular.
Los sustantivos concretos corresponden a objetos que existen de manera independiente y se pueden percibir a través de los sentidos: pájaro, ventana, canción.
Los sustantivos abstractos designan cosas no independientes, es decir que no existen por sí mismas sino que dan en otro ser u objeto: no existe la belleza, sino seres o cosas bellas.
Los sustantivos individuales son aquellos que se refieren a una o más cosas, dando la idea de unidad o unidades de individuos: cerdo, soldado, peces, flores.
Los sustantivos colectivos hacen referencia y destacan la idea de conjunto de seres o cosas, como por ejemplo, piara (conjunto de cerdos), ejército (conjunto de soldados), cardumen (conjunto de peces).
Desde el punto de vista morfológico, los accidentes del sustantivo, es decir, las variaciones en su forma, son el género y el número.
El género puede ser masculino o femenino
Son masculinos los nombres propios y comunes de varón y de los machos de las especies animales y los que indican oficios desempeñados por varones: Antonio, Matías, colibrí, profesor.
En general, los sustantivos terminados con la letra o indican que el género en masculino: Pablo, niño, perro, plato.
Existen algunas excepciones, como la nao, la dínamo y la mano, que son sustantivos femeninos.
Otros casos excepcionales son los sustantivos masculinos terminados en a: el poeta, el problema, el cometa, el puma.
Los sustantivos colectivos hacen referencia y destacan la idea de conjunto de seres o cosas, como por ejemplo, piara (conjunto de cerdos), ejército (conjunto de soldados), cardumen (conjunto de peces).
Desde el punto de vista morfológico, los accidentes del sustantivo, es decir, las variaciones en su forma, son el género y el número.
El género puede ser masculino o femenino
Son masculinos los nombres propios y comunes de varón y de los machos de las especies animales y los que indican oficios desempeñados por varones: Antonio, Matías, colibrí, profesor.
En general, los sustantivos terminados con la letra o indican que el género en masculino: Pablo, niño, perro, plato.
Existen algunas excepciones, como la nao, la dínamo y la mano, que son sustantivos femeninos.
Otros casos excepcionales son los sustantivos masculinos terminados en a: el poeta, el problema, el cometa, el puma.
De acuerdo con su significación, también corresponden al género masculino los sustantivos que se refieren a nombres de ríos, mares, océanos y lagos, como el Paraná, el Mediterráneo, el Índico, el Lácar; a números (el seis, el doscientos); a notas musicales (el re); a puntos cardinales (el sur); a días de la semana (el viernes) y a meses del año (el mes de agosto).
Los sustantivos masculinos se pueden transformar en femeninos si se les cambia la terminación o por a, por ejemplo: gato, gata; si se les agrega una a, como redactor, redactora; o mediante los sufijos esa, isa, ina o triz, como marqués, marquesa; sacerdore, sacerdotisa; zar, zarina; emprendedor, emperatriz.
Los sustantivos que pertenecen al género femenino son los nombres propios y comunes de la mujer y de las hembras de los animales y de los oficios desempeñados por mujeres: Eva, Inés, gaviota, planta, doctora.
La mayoría de los sustantivos femeninos terminan en a, aunque hay excepciones: el albacea, el fantasma, el enigma, que son masculinos.
También son femeninos los sustantivos que indican nombres de letras (la eñe, la equis) y ciudades de la antigüedad (la antigua Lesbos, la antigua Cartago).
El otro accidente morfológico del sustantivo es el número, que señala la oposición entre una sola persona o cosa y más de una, indicando la cantidad. Puede ser singular o plural.
El singular hace referencia a un solo ejempla; cuando se indica más de uno, se utiliza el plural.
El plural puede tener distintas formas. Cuando el sustantivo singular termina en consonante o en vocal acentuada (excepto e), se le agrega la terminación es (camión, camiones; alelí, alelíes). En el último caso existen algunas excepciones a la regla, en las cuales solo se agrega una s (mamá, mamás; café, cafés).
Si el sustantivo finaliza en vocal no acentuada, el plural se forma agregándole una s al singular: lapicera, lapiceras; vaso, vasos.
Cuando el singular es un sustantivo grave terminado en s, x o m la forma plural permanece invariable: crisis, jueves, caries.
Además, existen sustantivos que poseen solamente la forma plural: los Alpes, los anteojos, los modales.
Los sustantivos masculinos se pueden transformar en femeninos si se les cambia la terminación o por a, por ejemplo: gato, gata; si se les agrega una a, como redactor, redactora; o mediante los sufijos esa, isa, ina o triz, como marqués, marquesa; sacerdore, sacerdotisa; zar, zarina; emprendedor, emperatriz.
Los sustantivos que pertenecen al género femenino son los nombres propios y comunes de la mujer y de las hembras de los animales y de los oficios desempeñados por mujeres: Eva, Inés, gaviota, planta, doctora.
La mayoría de los sustantivos femeninos terminan en a, aunque hay excepciones: el albacea, el fantasma, el enigma, que son masculinos.
También son femeninos los sustantivos que indican nombres de letras (la eñe, la equis) y ciudades de la antigüedad (la antigua Lesbos, la antigua Cartago).
El otro accidente morfológico del sustantivo es el número, que señala la oposición entre una sola persona o cosa y más de una, indicando la cantidad. Puede ser singular o plural.
El singular hace referencia a un solo ejempla; cuando se indica más de uno, se utiliza el plural.
El plural puede tener distintas formas. Cuando el sustantivo singular termina en consonante o en vocal acentuada (excepto e), se le agrega la terminación es (camión, camiones; alelí, alelíes). En el último caso existen algunas excepciones a la regla, en las cuales solo se agrega una s (mamá, mamás; café, cafés).
Si el sustantivo finaliza en vocal no acentuada, el plural se forma agregándole una s al singular: lapicera, lapiceras; vaso, vasos.
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